martes, 30 de septiembre de 2014

I Triatlon Pinto

Y sin haberme percatado, un triatlon he disfrutado


       Pues todo empezó a mediados de agosto cuando me acerqué a la tienda de bicicletas 4bikeshop para comprar unos geles. Una vez allí y como no paro de hablar y el que se encontraba al otro lado del mostrador tampoco es mudo (Emilio), nos pusimos a hablar de nuestras aventuras de carreras, el uno con la bici y el que suscribe con las zapatillas. Y una  cosa nos llevo a la otra y me suelta así a bote pronto:

        - Pues vamos a celebrar un triatlón aquí en Pinto a finales de septiembre.
       Momento de indecisión mía. (2 segundos y medio)

       -Mmmmmmmmmm, pues apuntamé.

       Así a las bravas, sin nadar desde hace más de 15 años y sin montar en bici el último año, me apuntó a un triatlón, 500 m de natación, 20 km de bicicleta de montaña y 5 km corriendo.



       Salgo de la tienda y al primero que lío es a mi vecino Javi (tiene el cielo ganado conmigo, le meto en cada embolado que pa qué), monto un grupo en el Whatsapp y otros tres más que engaño, jajaja. Al final lío a once personas, jajaja.



       Al final en ese mes y medio de "entrenamiento", lo entrecomillo porque no entrené específicamente la prueba, a mediados de octubre tengo el Medio Ultratrail de Gredos (52 km y 3650+) y no podía cambiar mucho mi entrenamiento. Pues nadé 5 veces, para ver que era capaz de nadar los 500 m (todos con mi inseparable vecino) y salí 3 veces en bici, las dos últimas para realizar el circuito de bicicleta y constatar que soy muy lento en bici, 1 hora y quince minutos para realizar 20 km en bicicleta. Madre mía, soy una tortuga en la bici, preferiría hacerlo corriendo.



       Pues sin haberme percatado me encuentro el día de la prueba levantándome un par de horas antes para desayunar y demás quehaceres. Y que es lo que me encuentro.... mi compañero de fatigas, mi vecino Javi, no puede venir, esta con un trancazo de tres pares de narices. Vaya mala suerte, preparándolo durante este mes y al final en el último momento se nos cae de la convocatoria. No pasa nada campeón, la próxima lo bordamos.

Pero por otra parte Carlitos que acababa de ser papá hace 5 días se nos une a la convocatoria en el último momento.


       Quedamos en el callejón con su hijo y con su cuñado y nos dirigimos hacia el Parque Juan Carlos I para dejar la bici, coger el chip y encontrarnos con el grupo de triatlón del Whatsapp y con Dani, otro compañero de fatigas que no le hace falta mucho para liarle, jajaja.



       Una vez cogido el chip, nos tatúan el dorsal en el brazo (128), dejamos las cosas y nos empezamos a quitar la ropa para empezar a nadar. Solamente con unas mallas y a pecho descubierto a las 930 se daba la salida a la primera de las tandas, y así una tras otra hasta llegar a la quinta, la última, donde nos encontramos los popularísimos, jejeje. 


       Nos metemos en el agua del lago Juan Carlos I (donde mi mujer no quería que me metiese por no coger alguna enfermedad, jijijijiji), suena la música de Piratas del Caribe a todo trapo aceleramos motores y al ataquerrrrrrrrr.





       Bueno, pues que os voy a contar, si me pierdo en la sierra, como no me voy a perder en un lago, jejeje. Pues anda que no di vueltas, para mi la línea recta no existe, de pared, en pared. Lo siento si me cruce con alguien y le molesté pero era incapaz de seguir la linea recta (según mi garmin hice 680m de natación y eran 500m), se me empañaron las gafas y con tanto movimiento no veía un pimiento. 





Pero con todo y con eso no se me dio mal 10:42 y ahora a por la transición, que parecía que estaba en un probador, esto no que hace calor, esto no que hace frío, el gel, donde he puesto el gel y un largo etcétera, pero bueno creo que estábamos todos igual. 




       Pero allí tenía a todo mi equipo de animación dándolo todo, al final más de 10 personas tenía animándome como unos verdaderos campeones, que vinieron a verme madrugando y amenazando lluvia, mis hijos, mi mujer, mis padres, mi hermano y mi cuñada, mis sobrinos, mi tía y amigos como Pruden, su hijo y Carlos.







       Salí con la bici con Dani y Carlitos, con sus bicicletas de 29" y me pegaron una lijada que ni seguir rueda ni nada de nada. De todas maneras si hubieran ido con una de 22" tampoco les hubiera pillado. Y al final en el kilómetro dos me encontré en tierra de nadie, más sólo que la una, y pensando que iba a tardar más de 1:30 en hacer el segmento de bicicleta.



       Pero que narices, soy un sufridor nato y dije que iba a darlo todo y no me iba a dejar ni un gramo de fuerza, apreté los dientes y a por el primer ciclista que vi a lo lejos dije que lo tenía que coger, al final le cogí y me puse a su rueda y sin quererlo al final hicimos un pequeño grupo, en el que yo iba en el vagón de cola con la respiración por las nubes, con las piernas apunto de explotar, pero no podía dejarlos escapar. Así en el kilómetro 8 me puse yo a tirar un poco y así estuvimos un rato hasta que otra vez al vagón de cola, iban más rápido que yo, pero como Don Erre que Erre no podía dejarlos escapar. Por cierto carrerón que hizo un compañero de la carrera, que no supe quien era, que se le rompió la potencia y fue todo el rato a una mano y sujetando la potencia con la otra mano durante los ¡¡¡¡¡¡20 kilómetros¡¡¡¡¡¡. Me descubro ante tal corredor. 



       Llegando a Valdemoro ya no podía más, me entro un flato del infierno, iba fuera de ritmo, estaba reventado. Subiendo la cuesta de "a veinte" me ardían las piernas, pero sólo pensaba que ya todo era cuesta abajo. Otra vez apretada de dientes y a seguir pedaleando sin resuello. Vamossssss, me decía a mi mismo, una y otra vez. Cruzo el puente nuevo y ya estamos cerquita, me saca de ritmo un hombre mayor que iba con su bicicleta de paseo que casi me llevo por delante, y otra vez a sufrir con todo el desarrollo puesto en el asador. Las piernasssssss, ahghghghg¡¡¡¡¡¡¡¡ Por fin llegue a la transición, suelto la bici y a cambiarme de zapatillas. Al final reventé el cronometro, baje de una hora 58:42 en hacer los 20 kilómetros y hacía una semana lo había realizado 17 más. Lo había dado todo en la bici.






       Allí mi gran amigo Pruden me comenta que ya ha terminado el triatlón, que ahora empieza lo que más me gusta, que estaba chupao, jajaja. Pues anda que no queda, aunque fuese lo que más me gustase, pero me había dejado todo en la bici y no sabía como iban a responder las piernas.

       
       No hago nada más que empezar a correr y me encuentro a mis incondicionales en la subida de la cuesta dándome ánimos y algo preocupados por haber tardado tanto en la bici, jajaja. Hasta mi mujer llamó a la mujer de Dani por si me había pasado algo, jejeje. Lo que no sabían es que soy Mr. Paquete en la bicicleta, ya se me podía haber pegado algo de Contador, por lo menos compartimos pueblo, jajaja. Allí estaban desgañitándose a puro grito y dándome esas alas que se necesitan para esa transición que es un infierno y las piernas pesan más que 2 sacos de cemento. Aprieto los dientes y a correr.






       Ahora sí, esto es lo mío, empiezo con mucha calma para ver que tal las piernas y sabiendo que no me queda nada dentro. Ya estaba en negativo en gramos de fuerza, no me había dejado ninguno para el final. Y sin enterarme empiezo a adelantar a gente, vuelvo a pasar al lado del "Frente Chipirón" y allí están dando palmas y animando con todo el corazón. A seguir dándole, todavía quedan 3 kilómetros, me encuentro bien, aprieto dientes y a volarrrrr. Una recta, otra recta, volvemos a entrar en el parque, le digo al otro compi de 4bikeshop que al final he terminado y encaro la recta de meta. Vamossssss¡¡¡¡¡¡


       Allí estaban mis hijos y mis sobrinos esperándome para entrar en meta, los cojo a los 4 de la mano y para dentro, no si antes una caída de los pequeños sin ninguna herida de guerra, pero con el correspondiente susto. 3,2,1 Finisher¡¡¡¡¡¡¡


       Recogida de la pedazo de bolsa que nos dieron, que tengo fruta para toda la semana, muchas gracias me habéis ahorrado el mercadillo del lunes, jejeje.

       Vuelta a por la bici y a devolver el chip, ¿y que es lo que me encuentro cuando llego?  La rueda trasera de la bici pinchada, a saber desde cuando la tengo pinchada, con lo gañan que soy con la bici....... Pero yo creo que tuvo que ser al final porque digo yo que hubiera notado algo, pero como iba con todo.....

       Pues al final 1:32:04, contentísimo, quería bajar de dos horas y creo que lo cumplí con creces. Eso si, esperarme para el año que viene y cuidaico conmigo que lo voy a dar todo.

       Dar las gracias a muchísima gente, a Javi mi vecino que hemos realizado todos los entrenos juntos a deshoras y con 20 minutos de natación en Valdemoro, sin agobios, jajaja.
A mi mujer por aguantarme esos días, a mis pequeñines porque son los que me dan la fuerza para darlo todo en cada carrera. A mi hermano, Sara mi cuñada y mis sobris por estar ahí animándome y haciendo unas fotos espectaculares, a mis padres que vienen a verme en una carrera por primera vez y animaban como los que más. A mi tía Rita que con 80 años se levantó la mujer el sábado creyendo que era ese día y estuvo la pobre mujer esperando la carrera y era el domingo, pero tampoco falto y estuvo allí dándolo todo. A Carlitos, Luismi y Edu por pasarlo también estos días con las apuestas (que perdí) y por darlo todo en el triatlón demostrando que son unos fueras de serie. A mi compañero de fatigas en todos los deportes Dani, su mujer Sara y a sus dos princesas. A mi gran amigo Pruden y a su hijo Diego por estar con silbatos animándome y se escuchaban desde el puente nuevo, y por ir dándome pequeños consejos en las transiciones, y como no por sus fotos. A mi entrenador Octavio Pérez que aunque no teníamos fijada esta prueba en el calendario la metimos con calzador y la preparamos como pudimos en tampoco tiempo, aunque el no dejarse ni un gramo de fuerza se entrena todos los días, o no, Mister?

       A todos los voluntarios que han ayudado a montar tan gran espectáculo, porque sin ellos, esto no hubiera sido posible. Una organización de 10 en todos los sentidos. Sois los mejores. Gracias por habernos dejado disfrutar.

       A todos los pinteñ@s porque en cada curva, cada recta, cada vez que sacaba la cabeza de debajo del agua veía siempre a una cara amiga dándote ánimos. Muchas gracias¡¡¡¡¡

         A la mejor tienda de bicicletas de Pinto: 4bikershop. Por aguantarme todas las veces que pasé a preguntar algo y siempre me atienden con una sonrisa y por colaborar con tantas ganas en este pedazo de evento.

       Y como no a las TRILOCAS, porque sin ellas todo esto no hubiera sido posible, pedazo de carrera que se han montado. El año que viene os toca competir a vosotras y los demás nos dedicamos a montarlo, jejeje.

       Bueno, pues con esto y un bizcocho el año que viene tener cuidaico conmigo que voy a romper todos los registros. Ahora a empezar a entrenar para el año que viene para estar como Javi (Gomez Noya), jajaja.

       Tener cuidado ahí fuera LEBRELES¡¡¡¡¡¡¡¡